27.2.2008.
Ayer publicó el Heraldo un artículo de una activista contra los cultivos energéticos. Dio opiniones y dispersión de cifras. Y los tópicos de la crisis alimentaria. Esta es otra visión. frid
Por: Jesús Domingo
"El regadío y los cultivos alimentarios y energéticos en España" era el título de la nota de prensa con las conclusiones de la jornada de estudio organida por el "Foro Agrario" que tubo lugar a principos del mes de Febrero.
El regadío, los cultivos alimentarios y energéticos
"El regadío y los cultivos alimentarios y energéticos en España" era el título de la nota de prensa con las conclusiones de la jornada de estudio organida por el "Foro Agrario" que tubo lugar a principos del mes de Febrero.
Y es que la polémica que se presenta en nuestro país sobre el destino de agua para el abastecimiento de los regadíos -donde el uso consuntivo llega a representar actualmente el 70% del total- por una parte y, por otra, la necesidad de abastecer los mercados de acuerdo con las demandas de los consumidores unida al reto que en estos momentos presenta la producción de cultivos agroenergéticos y su influencia en el Cambio Climático, es lo que impulsó a la Fundación Foro Agrario a realizar esta Jornada de Estudio, con la participación de más de cuarenta expertos seleccionados del mundo académico, organizaciones profesionales, fabricantes de equipos de riegos, comunidades de regantes, etc.
Teniendo en cuenta la polémica creada en nuestras comarcas sobre la posibilidades o no de riego en la presente campaña y las repercusiones económicas y sociales que eso puede tener para muchos agricultores especialmente fruticultores en particular, para la población de los municipios afectados en general y para conocimiento de todos los ciudaddanos, en especial para nuestros habituales lectores, me parece interesante comentar algunas de la conclusiones a las que sobre el agua de riego llegaron en la jornada comentada.
Entre ellas tenemos:
1.-El regadío es un elemento de la máxima importancia en los procesos de vertebración del territorio, obtención de alimentos y otras materias primas -como pueden ser los productos energéticos-, y representan un factor de primer orden en la calidad de vida de la población rural.
2.-Existen numerosos factores sociales, económicos y medioambientales que están ejerciendo presión sobre el regadío y que obligan a gestionar adecuadamente los recursos hídricos, si se quiere con ellos procurar el abastecimiento a la población consumidora, en orden a garantizar la necesaria seguridad calidad alimentaria.
3.-Se considera muy importante poder incorporar al regadío las aguas residuales y las procedentes de la desalación. Pero teniendo en cuenta que para las primeras, es necesario exigir que las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) entreguen el agua con la máxima garantía sanitaria y con suficiente estabilidad en las características fisicoquímicas que se reflejen en sus análisis. Para las aguas procedentes de las desaladoras, se considera que la cifra de 0,50 Euros por metro cúbico, a la que actualmente se estima su coste, es absolutamente insoportable para los agricultores.
4.-La agricultura en general y el regadío en particular, están sufriendo agresiones permanentes, que se manifiestan cada vez que se presenta alguna nueva normativa de carácter medio ambiental. En la Jornada se propuso crear una Plataforma o un Observatorio de Riego que aglutine a los ministerios implicados en el tema del regadío con los científicos, técnicos, regantes, empresas comercializadoras de materiales de riego, etc., para defender los muy importantes aspectos beneficiosos del regadío frente a los ataques de terceros u otras opiniones insidiosas.
5.-Para los cultivos productores de biomasa lignocelulósica, que se obtienen relaciones energéticas output/input que varían entre 10, para el sorgo y 40 para especies leñosas, como el chopo en plantaciones de alta densidad y cortes frecuentes, lo que señala el interés de estos cultivos.
6.-Para los cultivos productores de aceites destinados a su transformación en biodiesel, las posibilidades actuales en España están reducidas a la colza y al girasol. La colza puede tener en los regadíos el mismo espacio que ocupan los cereales menores (cebada, avena), donde puede mejorar las rotaciones de cultivo y, especialmente, el aprovechamiento del nitrógeno residual del suelo. Las necesidades de agua de la colza son similares a las de los cereales de invierno (trigo y cebada), es decir muy pocas en cultivos de regadio y nulas en secano. Los balances energéticos del cultivo de colza en regadío son suficientemente favorables (varían entre 2,3 y 3), especialmente con altas producciones (superiores a 3 t/ha) y con bombeos de agua razonables. No obstante estos cultivos hoy encuentran una gran barrera para el desarrollo para biodiesel, es la gran demanda de cereales con precios que superan los 180 Euros por tonelada.
Ciertamente que esto esto nos lleva a pensar en la necesidad de, al menos intantarlo, cambiar el chip entre los que consideran un derroche utilizar el agua para el riego. Si ella sería imposible abastecer de aliemntos a la sociedad y menos aún que esto cumplan con las mínimas exigencias sanitarias y cualitativas, actualmente nuestros productos cumplen con las máximas. Por lo que podemos concluir que el agua de riego no es un derroche sino una garantía sanitaria tan necesaria, casi, como el agua de uso de boca.
Jesús Domingo Martínez
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