9/01/2007

Greenpeace y sus manías. Informe parcial e "irresponsable".

¿Quien quema el monte?

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Greenpeace España ha realizado un análisis para sacar del anonimato a los que están quemando los bosques españoles. Ha identificado 8 arquetipos y ha realizado un "retrato robot" de los mismos...

Informe parcial e "irresponsable"

 

Greenpeace España ha realizado un análisis para sacar del anonimato a los que están quemando los bosques españoles. Ha identificado 8 arquetipos y ha realizado un "retrato robot" de los mismos. De estos 8 personajes, causantes de los grandes incendios que han asolado los montes españoles en las últimas décadas, aparecen: en primer lugar "El Agricultor irresponsable: que con sus periódicas quemas de rastrojos ocasiona más del 31% de los incendios y el 13,9% de la superficie quemada". En segundo lugar, el ganadero inconsciente: que con sus quemas para la regeneración de pastos ocasiona el 21,5% de los incendios y produce el 26,5% de la superficie quemada.

 

Como era de esperar, ante tan injusta acusación las OPAS han reaccionado y califican de "irresponsable" el informe publicado por Greenpeace sobre los incendiarios. Recuerdan a la organización ecologista que la realidad del mundo rural ha cambiado mucho en los últimos diez años y esto "no se refleja en el informe" que no "profundiza en el asunto", acusando al sector con unos datos "sacados de contexto".

 

Consideran que "falta documentación y conocimiento del sector" y que demuestra "un claro desconocimiento del medio rural". Y es que el informe que hizo público Greenpeace: "Incendiarios. El perfil de los que queman el bosque en España" no ha gustado al sector agrario y ganadero, acusado de ser el causante de más del 50 por ciento de los incendios por causas conocidas en España.

 

No tienen en cuenta que en los últimos años se ha producido un cambio de mentalidad en la sociedad rural "que no recoge el informe". "Hoy en día ya no se usa el fuego para regenerar el pasto, porque además de existir maquinaria para llevar a cabo esta labor, cualquier agricultor o ganadero sabe que para prender fuego en su propiedad tiene que pedir permiso", insisten las organizaciones.

 

Continúan también las OPAS diciendo que quieren hacer especial hincapié en que este informe no se sostiene, ya que recuerda que "somos nosotros, los ganaderos y los agricultores los que vivimos en el medio rural, es donde tenemos nuestra casa y es el medio ambiente el que nos proporciona lo necesario para vivir, ¿cómo vamos a querer destruirlo cuándo estamos haciendo grandes esfuerzos para evitar catástrofes como los incendios?".

 

Lamentan la errónea idea que se desprende del informe de Greenpeace porque "no hay mayor pena que ver cómo tu monte, el lugar donde vives, está cubierto por una capa de ceniza y pensar en cómo tu propia casa se ha visto amenaza por las llamas". Y es que todas ellasinsisten en que "no se puede cargar la responsabilidad sobre un sector que se preocupa por el campo en el que vive".

 

Hay que recordar también el cambio que se ha producido en la última década, y afirma que los incendios que se le han podido atribuir al sector se identifican con unas prácticas tradicionales, como puede ser la quema de rastrojos, cada vez más desfasadas y prohibidas si no hay medios públicos que las controlan.

 

Además, dicen, no están "dispuestos a consentir que se compare al sector con otro tipo de incendiarios" cuando, en todo caso, aun llegando a provocar algunos incendios "jamás se han hecho con intencionalidad". Preguntan ¿qué pasa con ese 47 por ciento de los incendios con causas desconocidas?, "de eso es de los que tendríamos que preocuparnos realmente, ya que es una cifra realmente escalofriante para no saber qué o quien produce ese dato".

 

"Nos hubiese gustado que para la elaboración del informe, Greenpeace hubiese contado con nosotros para un verdadero conocimiento de la realidad, que hubiese profundizado y que no se quedase sólo con algunos datos", apunta. Es por ello que las organizaciones agrarias coinciden en pedir a Greenpeace un acercamiento al sector para contrastar los datos que han publicado, para una mayor claridad que no lleve a una distorsión de la realidad y a una criminalización del sector.

 

Jesús Domingo

1 comentarios:

cartapacio.liberal dijo...

Nuestros amigos de greenpeace son algo maniqueos, dividen el mundo en buenos (ellos y los que obedecen a su dictadura) y los malos (que son los que tienen criterio propio o posturas intermedias). Se han erigido en la conciencia ecológica. A veces con acierto, otras con planteamientos poco justificados técnicamente. Su corazón o su sentimiento lo justifican todo, aún lo que no es cierto. Al fin y al cabo ¿qué es el hombre para ellos sino la peor plaga del planeta tierra?