Chequeo o reforma agraria en toda regla.

Chequeo o reforma agraria en toda regla.

Según un primer borrador, Bruselas pretende incluir estas ideas: El fin de las cuotas lecheras, un mayor recorte en las ayudas directas para reforzar el desarrollo rural y la conversión del máximo posible de subvenciones en un pago fijo por explotación -independiente de la cantidad producida-, en su propuesta sobre la revisión o lo que ha querido llamar "chequeo médico" de la PAC (Política Agraria Comunitaria), que hará pública el día 20 de noviembre.


No obstante, el borrador deja sin precisar actuaciones a largo plazo ante la actual subida precios por la presente escasez de oferta de cereales y la CE (Comisión Europea) se limita a indicar que "vigilará de cerca la situación actual de los mercados", para sacar conclusiones.

Al parecer, el proyecto de noviembre será el primero para debatir sobre la reforma entre los países de las UE (Unión Europea), pues Bruselas dará a conocer las propuestas legales sobre esta revisión de la PAC en primavera de 2008.


Recordemos que la PAC absorbe cerca de la mitad de los fondos comunitarios y cuenta con una partida de 55.000 millones de euros para 2007, si bien la Comisión tiene en cuenta que este peso va a ir decreciendo de aquí a 2013, tal y como acordó la UE cuando aprobó sus perspectivas financieras.


Como sabemos los lectores del Diario de Girona, la actual PAC se basa ya en el llamado "pago único" o ayuda por superficie y explotación, que se da al agricultor independientemente de la cantidad cosechada y que se aplica para parte de los sectores agrícolas, por ejemplo el olivar, el tabaco o los cereales.


Con este "chequeo médico" la CE quiere lanzar un debate para convertir la máxima proporción posible de ayudas en el pago único. En concreto plantea "permitir a los Estados miembros" ajustarse más hacia una prima más fija o menos variable entre 2009 y 2013. Consideran desde Bruselas que el pago único ha sido un éxito en cultivos arables.


Sin embargo, aboga por mantener parcialmente ligada a la producción una parte de ayudas "en algunas regiones" donde hay niveles de producción bajos pero son importantes desde el punto de vista ambiental o económico. En este caso cita el ejemplo de la producción de vacas lecheras en explotaciones extensivas. La CE estudia que las excepciones al pago total de la producción sean sólo forma regional.

Asimismo, Bruselas proyecta incrementar hasta el 13% el recorte de las ayudas agrícolas directas para destinar ese dinero a planes de desarrollo rural -acciones cofinanciadas cuyo fin es promover en el campo actividades distintas o complementarias a la agricultura-. Este trasvase es conocido como la "modulación obligatoria" de las ayudas y actualmente está en el 5% de las ayudas. Para la revisión de la PAC, la CE pretende incrementar el recorte un 2% anual, desde 2010, que iría subiendo progresivamente de forma que en 2013 la reducción de las ayudas directas sería de un 13%, según el borrador, que aún podría cambiar.

En cuanto a la intervención (pago de un precio mínimo por entregar el cereal a almacenes público), Bruselas proyecta reducirlo. En este sentido, cita el ejemplo del maíz ya que la UE acordó recortarla hasta suprimirla definitivamente en 2009-2010; la CE pretende aplicar el mismo principio para otros cereales, salvo para el trigo, caso en el que apunta que la intervención sí se podría mantener.


Por otra parte, la CE sugiere el final del barbecho obligatorio, pues ve conveniente "movilizar" la tierra que hasta ahora se tenía que retirar (10% del área de cultivo), pero quiere compensar esta idea promoviendo apoyos al desarrollo rural por la mejor gestión del agua, el mantenimiento de pastos y "corredores" para garantizar la biodiversidad.


En cuanto al sector lácteo, Bruselas se muestra a favor de que el régimen de cuotas termine definitivamente el 31 de marzo de 2015 e insiste en una transición suave hacia políticas más orientadas al mercado antes de que expire el sistema de cupos. Esto significa un incremento gradual de cuotas, que se establecerá según un análisis que Bruselas presentará a final de año. En el borrador, Bruselas propone medidas para mitigar el impacto negativo en regiones montañosas que podría tener la liberalización de la producción lechera.


Otra parte de la revisión de la PAC afectará a medidas ambientales y en ese sentido la CE quiere que los ahorros de los recortes de las ayudas como consecuencia de la "modulación" sean para gestión de riesgos, uso sostenible del agua, porque incrementarán las presiones con el cambio climático.


Alude a los incentivos para la producción de biocarburantes y apunta la conveniencia de examinar si es oportuno establecer nuevas ayudas para obtener materia prima destinada a esos combustibles ecológicos.


Por lo que podemos apreciar, en un primer estudio, no se trata de un "chequeo" sino de una reforma en toda regla. Esperemos que algunas de estas revisiones se puedan discutir a fondo mientras se mantienen por muchos años la actual PAC. No olvidemos que cada revisión arrastra a un buen grupo de agricultores a la retirada total.


Jesús Domingo Martínez

Ver: Chequeo o reforma en toda regla